Es el área encargada del mantenimiento y conservación de los parques y jardines municipales. En su cuidado recae la preservación de los árboles y de las composiciones vegetales como rosaledas, césped o topiarios. Supervisa el estado de accesos a plazas y parques, así como el pavimento, vallas y cerramientos, bancos, papeleras, farolas, fuentes y columpios.